Porque más vale prevenir que curar, háztelo mirar.

sábado, marzo 03, 2007

Chocolate para un corazón y un cerebro más sano

El chocolate, cuyos efectos benéficos para el sistema cardiovascular ya fueron revelados por ensayos clínicos, también parece favorecer la circulación sanguínea cerebral, según dos estudios publicados en Estados Unidos.
La primera investigación ha sido realizada por el doctor Ian Macdonald, de la facultad de Medicina de Nottingham en Gran Bretaña, con mujeres jóvenes para comprobar si una bebida rica en flavonoide, la sustancia antioxidante que contienen los granos de cacao, aumentaba sus funciones mentales durante un test.
Aunque el preparado, "CocoAvia", proporcionado para el estudio por su fabricante, no mejoró el estado de forma de estas personas en la prueba en comparación con el grupo que no consumió la bebida, ésta incrementó netamente la circulación sanguínea en sus cerebros durante un período de dos a tres horas, precisa el médico.
Según él, investigaciones más profundas podrían mostrar un potencial prometedor de las bebidas ricas en flavonoide para tratar personas de edad que hayan sufrido ataques cerebrales y que sufran de demencia.
Otro estudio dirigido por el doctor Norman Hollenberg de la facultad de Medicina de Harvard (Massachusetts, noreste) con personas de buena salud mayores de 50 años, también acusó un claro aumento del flujo sanguíneo en el cerebro de quienes consumieron una bebida rica en flavonoide. Este médico estudió los efectos del cacao en los indígenas Kuna de Panamá, que consumen la sustancia regularmente y cuyos ancianos no sufren de hipertensión arterial ni deterioro cerebral.
El investigador estima, sin embargo, que los efectos del cacao sobre el cerebro, aunque parecen prometedores en los estudios, deben ser todavía corroborados a través de ensayos químicos más profundos.
Los chocolates que se consumen habitualmente son también ricos en azúcar y grasa, pero la cantidad de flavonoide es inexistente. Los fabricantes retiran en el proceso de fabricación esta sustancia, que da un gusto amargo al cacao puro.
Según un estudio de la doctora Diane Becker, profesora de la facultad de Medicina Johns Hopkins de Baltimore (Maryland, este), publicado en noviembre pasado, algunos cuadrados -onzas- de chocolate tienen el mismo efecto que la aspirina en la reducción de la coagulación sanguínea y de los riesgos de bloqueo de las arterias, que provocan numerosas crisis cardíacas.
El flavonoide, cuyos efectos dilatadores sobre las arterias se conocen desde hace tiempo, también se encuentra en el té, las frutas, las leguminosas y el vino. Al parecer, ayuda a la planta a reparar lesiones y a protegerlas contra los parásitos y plagas. Los mayas y los aztecas sacaban provecho de las propiedades medicinales del cacao hace más de 2.000 años, antes de que los conquistadores lo llevaran a Europa en la Edad Media.